Cuando el vicepresidente sénior de ingeniería de software de Apple, Craig Federighi, presentó la nueva interfaz de usuario multitarea en iPadOS 26 en la Conferencia Mundial de Desarrolladores de la compañía esta semana, lo hizo de la misma manera que presentó la aplicación Calculadora para el iPad el año pasado o los temporizadores en la aplicación Reloj del iPad el año anterior : con un toque de sarcasmo.

"¡Guau!", exclama Federighi con entusiasmo, ligeramente exagerado, tras una hora y 19 minutos de una presentación de 90 minutos . "¿Más ventanas, un puntero más afilado y una barra de menú? ¿Quién lo hubiera dicho? ¡Hemos logrado un  lanzamiento alucinante !"

Esto provoca una risa sensata entre la audiencia reunida de desarrolladores, medios de comunicación y empleados de Apple que miran la conferencia en el campus de Apple Park, donde conseguí un buen asiento, aunque no excelente, para ver la conferencia, en gran parte pregrabada, en una gigantesca pantalla al aire libre.

Federighi reconoce, y se burla ligeramente, de los desarrolladores, usuarios profesionales y personalidades de los medios que llevan años pidiendo que el iPad de Apple se comporte más como un ordenador tradicional. Y tras muchos pasos graduales, incluyendo un gran fracaso con la interfaz limitada y llena de errores de Stage Manager hace un par de años, Apple finalmente ha respondido a las peticiones de una multitarea similar a la de Mac con una interfaz claramente similar a la de Mac, un administrador de archivos mejorado y un mejor soporte para ejecutar tareas en segundo plano.

Pero si este movimiento era tan obvio, ¿por qué tardó tanto en llegar hasta aquí? Esta es una de las preguntas que analizamos a fondo cuando nos reunimos con Federighi y el vicepresidente sénior de Marketing Mundial, Greg Joswiak, para una charla posterior a la conferencia principal a principios de esta semana.

Solía ​​tratarse de restricciones de hardware.

La gente ha estado intentando utilizar los iPads (y defenderlos filosóficamente ) como si fueran computadoras reales prácticamente desde el momento en que se introdujeron hace 15 años.